Ya hemos inaugurado nuestra nueva Aula de Música y Arte, un proyecto que veníamos persiguiendo con enorme ilusión desde hacía tiempo y que ahora es una realidad, gracias a la ayuda que el APA, al hacerse cargo de la compra de la mayor parte del equipamiento de instrumentos musicales del aula.
El Colegio Juan Pablo II de Parla ha apostado siempre por el potencial educativo que tiene la música y su contribución para impulsar desarrollo integral de nuestros alumnos. No en vano llevamos ya muchos años con nuestro Proyecto Pedagógico Musical, programa del cual el Grado Musical es su último escalón.
La música supone una ayuda inestimable para facilitar a los alumnos la búsqueda de la verdad. Al enfrentarse a la belleza, la persona es capaz de salir de sí mismo, de encontrarse con el otro. Porque trascender lleva siempre a un encuentro personal, y a través de la belleza el hombre puede llegar al bien, a la verdad, a la bondad.
Reconocer esta belleza, requiere un esfuerzo y supone siempre un proceso. El cultivo del lenguaje musical nos ayuda a todo esto, a educar la sensibilidad, de manera que perciba e identifique la belleza con más naturalidad.
Por otra parte, otra gran fortaleza de la formación musical, es el desarrollo cerebral que inducimos en la persona que a él se enfrenta. El desarrollo del lenguaje artístico va a tener un efecto directo en otras capacidades básicas que la persona debe también desarrollar y potenciar, porque no estamos formados por departamentos estancos, sino que somos una unidad.
La belleza y el gusto por el arte nos ha acompañado desde siempre, y ahora serán, más aún si cabe, parte del día a día de nuestros alumnos, gracias a nuestra nueva Aula de Música y Arte.
Porque, en nuestro colegio, sabemos muy bien que “no todos están llamados a ser artistas… sin embargo, a cada hombre se le confía la tarea de ser artífice de la propia vida; … debe hacer de ella una obra de arte, una obra maestra” (Carta a los artistas, San Juan Pablo II).
Gracias al APA por su contribución a este proyecto.