Una experiencia promovida por el APA Juan Pablo II

«Se nota que la comida está elaborada aquí y no es de catering», «me ha sorprendido gratamente las cocinas, el control de alimentos y la organización», «destaco la disciplina que se enseña a los niños y el personal de comedor», «me parece estupendo poder conocer y compartir esta experiencia con más padres. Es una manera de acercarnos al cole y hacer más familia», «me gusta que todo es fresco y elaborado con productos de primera», «la comida me ha sabido a casera, no parece de comedor». Son algunos de los comentarios que nos han sido transmitidos por padres que han participado en este proyecto.

Un proyecto que comenzó durante el curso 2018-2019 como iniciativa del APA pero abierto para todas las familias del colegio. En su primer año se llevaron a cabo 6 jornadas y este año están ya programadas otras 4 jornadas, pero ¡serán más porque es todo un éxito! En cada grupo hay cabida para unos 15 padres, algún representante del APA y del comité directivo del colegio porque ¡entre todos formamos esta gran familia!

La idea surgió con la finalidad de que los padres conozcan de primera mano el funcionamiento de las cocinas y del comedor escolar: servicio, calidad de los productos que se sirven, así como la organización del mismo. Por eso, la funcionalidad de este servicio se realiza de la misma manera que los alumnos: los papás asistentes deben pasar por la línea con su bandeja para que se les sirva la comida. El menú es el que está establecido para alumnos, tal y como se informa a través del menú mensual. Tras finalizar la comida se realiza una visita a la cocina y el almacén de productos. Una vez allí el jefe de cocina explica el funcionamiento, haciendo especial hincapié en la elaboración de la comida de alérgicos.

Durante la visita se realiza una encuesta y la media de los resultados obtenidos puntúan la calidad de la comida en un 8’1, la limpieza en un 8’8, el personal de comedor en un 9’1, entre otros. Resultados muy positivos en este servicio y en la adecuación de sus instalaciones para poder llevarlo a cabo.

El 100% de participantes recomendarían el comedor entre las familias y animan a otros padres para que participen en este proyecto. Así que… ¿a qué esperas? ¿Todavía no has participado? ¡No lo pienses más! ¡Te esperamos! El dinero recaudado será destinado para otro proyecto denominado “Mi patio mola” que consistirá en convertir nuestro patio en un tablero de tamaño real de juegos tradicionales. ¡Cada vez falta menos!